8.- Palabras más, palabras menos
‘Un lenguaje sexy en la cama puede elevar la temperatura hasta provocar un infierno. Ayuda a desinhibirse, a relajar y, sobre todo, a cumplir fantasÃas. La clave está en usar las palabras correctas, para eso, nada mejor que preguntar’.
Karina Conka, dueña de un Sex Shop